Esta casa de veraneo fue adquirida por sus dueños actuales hace algunos años. El hecho de que la buhardilla no estuviera en uso fue factor decisivo a la hora de comprar la propiedad, ya que vieron la posibilidad de mejorar la casa y aportarle un valor agregado transformando el ático.
Los amigos y la familia visitaban la casa a menudo, y a medida que las familias se fueron haciendo más numerosas, tomó forma la idea de que el espacio se aprovecharía mejor como zona de dormitorios separada para los niños.
El objetivo era crear un espacio amplio, versátil y abierto que pudiera alojar hasta ocho niños.
La escalera fue un complemento nuevo que reemplazó la compuerta y la escalera existentes. La decoración con números en cada peldaño indica que se está entrando a la zona de los niños. Se eligió un mobiliario práctico y divertido que se ajustara al uso previsto para la habitación.
Se utilizaron dos ventanas para techo VELUX con orientación sur para captar la máxima cantidad de luz posible y disfrutar de las vistas. La decoración en color blanco se eligió a propósito para potenciar la luminosidad de la habitación.El ambiente rústico de la habitación está dado por las vigas a la vista y el muro de piedra en el extremo. Los muebles de segunda mano se eligieron cuidadosamente para complementarlo.